Con la finalidad de que los representantes, miembros y sectores relacionados con las asociaciones religiosas conozcan sus obligaciones fiscales y cómo deben cumplirlas en el presente año, el Colegio presentó el foro El ABC de las asociaciones religiosas, espacio que contó con la participación del contador José Herlindo Montiel Reyna, de la comisión de Apoyo al Ejercicio Independiente, y Porfirio Camarillo Vázquez, director general en Sociedad Educativa Juárez.
Durante su intervención, Camarillo Vázquez comentó que, como persona moral, las asociaciones religiosas pueden ejercitar todos los derechos que sean necesarios para realizar el objeto de su institución, “las personas morales obran y se obligan por medio de los órganos que las representan, sea por disposición de la ley o conforme a las disposiciones relativas de sus escrituras y de sus estatutos”.
Asimismo, el especialista en este régimen versó sobre las cuatro normas de gobierno eclesial, estatutos, procedimientos internos, manual disciplinario y principios doctrinales; este análisis se presentó al realizar un balance con las propias del estado. Bajo este contexto, Porfirio Camarillo detalló cada sector que conforman a las organizaciones religiosas, partiendo de la creencia, legislación, jurisdicción, cuerpos de gobierno y representantes.
Para complementar lo anterior, el contador Montiel Reyna explicó que dichas asociaciones religiosas, en específico, la iglesia católica es gobernada con base a jurisdicciones y organizadas en diócesis o iglesias particulares, bajo la autoridad de un obispo.
De igual forma, informó que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), a través de la Administración Central de Normatividad en Impuestos Internos, publica anualmente el régimen aplicable a las asociaciones religiosas, “a estas organizaciones aplica la Normas de Información Financiera (NIF) B16”Entidades con fines no lucrativos”, la cual no reciben contraprestaciones o beneficios económicos”, puntualizó el expositor.
Por último, los panelistas aseguraron que es importante conocer los estatus de cada asociación religiosa para cumplir adecuadamente con todos los requisitos contables y fiscales, aunado a que se debe vigilar que en los pagos por sueldos o servicios se cumplan con las retenciones correspondientes.
“Debemos velar por el cumplimiento con la obligación de expedición y obtención de CFDI por ingresos y gastos; además de cumplir, en su caso, con la presentación de avisos de lavado de dinero y permanecer al pendiente de las disposiciones de las distintas dependencias del gobierno mexicano”, concluyó José Herlindo Montiel.
Eventos recientes
Como promotor del desempeño profesional desde una perspectiva basada en valores, el Colegio de Contadores Públicos de México realizó su 7. ° Foro de Ética el pasado martes 26 de agosto de 2025.El evento abordó los desafíos y estrategias del ejercicio de la contaduría actual. La bienvenida estuvo a cargo del presidente del Colegio, Adolfo Ramírez Fernández del Castillo, y del presidente del Instituto Mexicano de Contadores Públicos, Héctor Amaya Estrella, quienes mencionaron la conveniencia de la actuación profesional conforme a valores y la relevancia creciente de la ética en un entorno cambiante y digital. La primera ponencia corrió a cargo de Juan Carlos Lugo Domínguez, quien abordó la relevancia de la Junta de Honor como órgano garante de la ética en la profesión contable y la próxima incorporación sobre el uso inteligencia artificial (IA) en el ejercicio profesional, la cual retomará los principios de la Unión Europea y de la Unesco sobre la IA, la cual debe ser explicativa, con solidez técnica y con supervisión humana.Estableció que: “El juicio crítico no puede delegarse a un algoritmo, se amenaza la independencia, ya que el juicio es lo más valioso de un auditor. Hay que tener presente que el uso de la IA conlleva un riesgo civil, legal. Debe asegurar transparencia, seguridad en la información y actualización de competencias”.El siguiente tema fue la Norma Internacional de Gestión de Calidad o NIGC-1, a cargo de Judith Galván Rodríguez, quien explicó que esta norma retoma el Código de Ética del IAASB para asegurar el buen desempeño de la auditoría. Expresó que: “La ética no es binaria, el cumplimiento sí lo es. El código de ética y las normas son guías para determinar el cumplimiento. La profesión contable se ha distinguido por poner en blanco y negro las directrices del comportamiento y así mejorar la confianza en la profesión”.Dentro de la NIGC-1, resaltó la ética como eje para su cumplimiento a través de documentar procesos, contar con un gobierno corporativo, no tener relaciones personales entre el cliente y el auditor (quien debe ser un profesional razonablemente informado y contar con el juicio para determinar el uso de la IA) y cuidar los medios por los que se comparte información. Todo ello, para no comprometer la integridad del auditor o la firma por un beneficio económico, medidas que contrarrestan el conflicto de interés y previenen o detectan el fraude.La siguiente ponencia corrió a cargo de Cynthia Escoffie Caballero y versó acerca de la ética en la Prevención de Lavado de Dinero (PLD). Refirió a las sanciones recientes aplicadas a tres instituciones financieras mexicanas acusadas de presunto lavado de dinero por el gobierno de Estados Unidos y que han derivado en la modificación de la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita (LFPIORPI).Al analizar el caso, observó faltas de control y de comportamiento ético, lo que ha dañado la reputación de las empresas, sus funcionarios y grupos de relación. Al respecto comentó: “No se habla de cumplimiento sin hablar de ética. Es necesario identificar a los clientes de los despachos y usuarios finales, detectar patrones de comportamiento, hacer análisis de riesgo, conocer las obligaciones y sanciones que representa el acto u omisión”. Recaló que es necesario tener mayor comunicación y claridad en las relaciones comerciales, no normalizar los desvíos o justificar el “siempre se ha hecho así”, hacer las preguntas correctas, no limitarse a seguir instrucciones o tener exceso de confianza, pues la confianza sin supervisión destruye, y “un mal negocio puede terminar todo el negocio”.Para concluir el foro, Karina Tapia Iturriaga compartió sobre la IES 4, ética, actitudes y valores profesionales. Explicó que esta norma internacional (que entrará en vigor el 6 de julio de 2026) establece los lineamientos de formación de los futuros contadores, se basa en los valores y actitudes para ofrecer un servicio, promover el interés público, el respeto por la ley, el compromiso con la calidad y el aprendizaje continuo.“Como formadores, y de acuerdo con la IES 4, debemos fomentar, entre nuestros jóvenes, reflexiones sobre dilemas éticos y cómo solucionarlos, fortalecer el pensamiento crítico, el juicio moral y la capacidad de analizar diferentes perspectivas antes de tomar decisiones. Todos tenemos dilemas éticos, todos los días, la cuestión es cómo los enfrentamos.”Recalcó la necesidad de renovar constantemente los planes de estudio, la incorporación de tecnología, hacer énfasis en la sostenibilidad y sembrar en los jóvenes una conciencia de escalabilidad, pues la imagen propia es la imagen de la empresa, cada uno tiene la capacidad de crearla o destruirla. El foro fue clausurado por María de Lourdes Nabor Cadena, presidenta de la comisión de Ética, organizadora del evento, y coordinado por Lucía Mónica López Mirafuentes y Edgar Alejandro Romero León.
La Inteligencia Artificial (IA) se está convirtiendo en una herramienta indispensable para el sector contable y financiero. Para profundizar en sus aplicaciones y cómo está cambiando la forma en se toman decisiones, se llevó a cabo el curso Herramientas para Inteligencia Artificial el 22 de agosto. El curso estuvo centrado en la aplicación práctica de la IA, bajo la coordinación de las comisiones de Prevención de Lavado de Dinero y Tecnologías Financieras y Emergentes, y contó con la participación de Alejandro Méndez Rueda como ponente, quien fue recibido por los coordinadores Gilberto Jesús Morales Navarrete y Viridiana Gutiérrez López. Durante su presentación, el contador Méndez Rueda destacó cómo la IA brinda nuevas capacidades de análisis para la toma de decisiones en un entorno económico cada vez más complicado. El objetivo del curso fue ofrecer una introducción a la IA y explorar sus aplicaciones en la contabilidad y la gestión financiera. En la primera parte del curso, se discutieron los conceptos básicos de la IA, definiéndola como un conjunto de técnicas que imitan la inteligencia humana para automatizar tareas. Méndez Rueda explicó varias técnicas de IA aplicadas a la gestión financiera empresarial: Sistemas expertos. Herramientas que simulan el pensamiento de expertos humanos para la toma de decisiones en áreas como auditoría o análisis de inversiones. Minería de datos: Una técnica esencial para extraer información valiosa de grandes volúmenes de datos. Redes neuronales. Se describieron sus arquitecturas y cómo se diferencian del cerebro biológico, mostrando su potencial para el análisis complejo. También se mencionaron otros conceptos como algoritmos genéticos, lógica difusa y la teoría de los conjuntos aproximados (rough sets). Por último, el contador Alejandro Méndez rueda destacó cómo la inteligencia artificial puede transformar la contabilidad al hacerse cargo de tareas rutinarias y mejorar la precisión de los datos. “Esto permitirá a los contadores concentrarse en actividades de mayor valor, como el análisis predictivo y la gestión de riesgos, lo que a su vez impulsa una toma de decisiones más eficiente y adecuada”, concluyó.El curso cerró con la entrega de certificados virtuales.
El pasado 21 de agosto, el Colegio y la comisión Sector Empresarial presentaron el Taller de Repse laboral, fiscal y seguridad social para empresarios, un evento que reunió a especialistas para discutir los impactos del Registro de Prestadoras de Servicios Especializados u Obras Especializadas (Repse) en el área laboral, fiscal y de seguridad social.El taller contó con la participación de Jorge Martínez Vargas, Carlos Orozco-Felgueres Loya y Alberto Flores Mesa, quienes expusieron, bajo la coordinación del contador Luis López Juárez, las obligaciones y normatividad que deben cumplir las empresas para una correcta administración en este contexto.Jorge Martínez abrió la sesión abordando algunos ejercicios prácticos con los asistentes, esto para conocer las obligaciones patronales, enfatizando la relevancia de formalizar la relación laboral mediante un contrato de trabajo y el alta correspondiente en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) e Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit).También destacó la necesidad de informar al SAT sobre la retención por salarios y llevar una nómina adecuada. "Cumplir con las obligaciones laborales, de seguro social e Infonavit es fundamental para mantener la legalidad en la operación de las empresas", subrayó Martínez, quien también versó sobre las iniciativas que aún están pendientes, como la reducción de la jornada laboral y el aumento de permisos de paternidad.Por su parte, Alberto Flores explicó el proceso de registro ante la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS); al respecto, detalló que la solicitud se puede realizar en línea sin costo y que la secretaría tiene un plazo de 20 días para dictaminar. Además, advirtió sobre las consecuencias de no renovar el registro a tiempo, lo que podría resultar en la cancelación automática del mismo y la imposibilidad de brindar servicios especializados.Finalmente, Carlos Orozco-Felgueres habló sobre las erogaciones con efectos fiscales, resaltando que la subcontratación de servicios y obras especializadas debe cumplir con los requisitos establecidos por la STPS, Impuesto sobre la Renta (ISR) e Impuesto al Valor Agregado (IVA). "Es crucial que las empresas comprendan que la subcontratación no debe formar parte del objeto social ni de la actividad preponderante", enfatizó.Previo al cierre del taller, los expositores coincidieron en señalar las consecuencias negativas que podrían surgir para 2025 si no se cumplen adecuadamente con las normativas vigentes. Entre las preocupaciones mencionadas se encuentran el cierre de empresas, pérdida de fuentes de trabajo, incremento a la informalidad, costos inciertos, disminución de la recaudación, entre otros.