La pandemia por Covid-19 trajo consigo que se retomara el tema del teletrabajo, cuyas iniciativas se habían gestado durante un periodo de tres años (2016-2019), pero fue en enero de 2021 que el artículo 311.° de la Ley Federal del Trabajo fue reformado, estableciendo que el “trabajo a domicilio es el que se ejecuta habitualmente para un patrón, en el domicilio del trabajador o en un local libremente elegido por él, sin vigilancia ni dirección inmediata de quien proporciona el trabajo”; no obstante, a raíz de esta modificación, se establecen derechos y obligaciones para los patrones y trabajadores, y con ello, impuestos relacionados con esta modalidad de trabajo a distancia.
La vicepresidencia de Desarrollo y Capacitación programó el curso Cálculo del Impuesto Sobre Nóminas y teletrabajo, que se efectuó el 4 de agosto, gestionado por la comisión técnica de Contribuciones Locales del Colegio, representado por las comisionadas Laila Yarina Moreno Sotelo, Ana Victoria Albareda Soberón y Nancy Leticia Segura León, quienes abordaron los temas de Teletrabajo: derechos y obligaciones tanto del patrón como de los trabajadores, y el Impuesto Sobre Nóminas (ISN) relativo al teletrabajo, según la entidad federativa.
Laila Moreno abrió su participación al hacer referencia del artículo 330-A al 330-K relacionados con los temas del teletrabajo, condiciones de trabajo, cambios de modalidad, reglamento interior de trabajo, obligaciones de los patrones, obligaciones de los trabajadores, equilibrio en la relación laboral, garantizar el derecho a la intimidad de los trabajadores, condiciones especiales de seguridad y salud, y las atribuciones y deberes especiales de los inspectores del trabajo.
“Se considera teletrabajo cuando se cubre 40% del total de la jornada. No se contempla como tal, aquel que se realice de forma ocasional o esporádica”.
En ese sentido, agregó que en esta modalidad de home office, los patrones contraen obligaciones “especiales” como el de proporcionar, instalar y encargarse del mantenimiento de los equipos necesarios para el teletrabajo; recibir oportunamente el trabajo y pagar los salarios; asumir los costos derivados del trabajo de la modalidad a distancia (teletrabajo); llevar registro de los insumos entregados en cumplimiento a las disposiciones en materia de seguridad y salud; implementar mecanismos que preserven la seguridad de la información y datos utilizados; respetar el derecho a la desconexión de los trabajadores; inscribir a los trabajadores en la seguridad social; establecer los mecanismos de capacitación y asesoría para garantizar la adaptación, aprendizaje y el uso adecuado de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC).
De igual forma, los trabajadores asumen obligaciones “especiales” como la guarda y conservación de los equipos y materiales que reciban del patrón; informar de manera oportuna el costo pactado por los servicios de telecomunicación y electricidad; obedecer disposiciones en materia de seguridad y salud; atender y utilizar los mecanismos para la supervisión de las actividades; atender las políticas y mecanismos de protección de datos; atender políticas, restricciones del uso de la información y almacenamiento.
A este respecto, Laila Moreno subrayó que “el cambio de modalidad de presencial a teletrabajo debe ser voluntario y establecido por escrito; además de ser reversible y considerar que las condiciones especiales de seguridad y salud para los trabajos será establecida por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en una Norma Oficial Mexicana”.
El teletrabajo desde el punto de vista fiscal fue retomado por la contadora Ana Victoria Albareda Soberón, quien habló del ISN, refiriéndose como una tributación estatal por el salario otorgado a los trabajadores y como pago estatal; es decir, este impuesto depende de cada entidad federativa, por lo que se centró en las tasas del ISN por Estado y de la normativa de cada región, tomando como referencia el artículo 31.° fracción IV de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, “en el que se habla de la obligación de los mexicanos de contribuir a los gastos públicos, así de la federación, como de la Ciudad de México o del Estado y municipio en que residan, de la manera proporcional y equitativa que dispongan las leyes”.
Sobre el particular habló de los principales elementos como el sujeto, objeto, base, tasa y época de pago; conjuntamente con el tema de las prestaciones legales y contractuales y lo que representa el tema de la previsión social como el pago complementario a las prestaciones que reciben los asalariados por su trabajo de acuerdo con la LFT, Ley del Seguro Social, Ley del Impuesto Sobre la Renta.
Eventos recientes
Este 8 de octubre, las instalaciones del Colegio se convirtieron en punto de reunión para 84 estudiantes provenientes de diversas instituciones educativas del país, quienes participaron en el Maratón del Conocimiento de Auditoría, EY; jornada que puso a prueba sus conocimientos técnicos, capacidad de análisis y trabajo en equipo.Durante la ceremonia inaugural, Adolfo Ramírez, presidente del Colegio, dirigió un mensaje a los universitarios destacando la importancia del esfuerzo y la preparación constante. “Para mí, este evento es celebrar el conocimiento, la pasión y el compromiso de excelencia de cada uno de ustedes. Afuera están las cosas difíciles, pero si no están preparados y dispuestos a afrontarlas como ahora lo están haciendo, será más complicado”, expresó.Ramírez reiteró que el Colegio, como Casa de la Contaduría, ha sido testigo del actuar profesional guiado por los más altos estándares técnicos y éticos, valores que también definen la esencia de este tipo de competencias.En representación de la firma patrocinadora, Ignacio Jaimes Pérez invitó a los participantes a reflexionar sobre su futuro profesional y la importancia de mantener una mentalidad de crecimiento. “Piensen en el futuro y recuerden que a veces las cosas se logran simplemente por atreverse a hacerlas y ustedes se atrevieron a estar aquí; que este sea uno de muchos éxitos en su vida profesional”, compartió.Dando paso al concurso, los equipos se enfrentaron a diferentes fases. La primera de ellas consistió en la resolución de reactivos; una vez superada la prueba, se dieron a conocer los ocho equipos que pasaron a la ronda final, mismos que presentaron un caso práctico.Luego de la exposición de casos, el jurado calificador, conformado por Miguel Ángel Ávila Milpa, Noel Huerta Hernández, Arturo Zavala Coca, Gabriela González Hernández, Marcela Rojas Ortega, Raúl Martínez Domínguez, Ernestina Hernández López, Tonantzin González Cervantes y Luis Palacios Rentería, este último como auditor; dieron a conocer a los tres primeros lugares:Primer lugar. Universidad Autónoma del Estado de México, campus FCA; equipo conformado por Nathanael Pliego Garcia, Esmeralda Peña García, Alberto Saldaña Rosete, Antonio Ortega Cruz, Brayan Reyes Hurtado, Luis Pedraza Sánchez y Valeria Rosas Hernández.Segundo lugar. Universidad Nacional Autónoma de México FCA; equipo que lo integró Chaac Baladez Gallegos, Kenya Monserrat Jiménez Del Angel, Aldo Santiago Contreras Vieyra, Danna Paola Pérez Cortes, Jonatan Colín Morales, Jonathan Santiago Monroy y Lucero Hernández Pérez.Tercer lugar. Instituto Politécnico Nacional, Unidad Santo Tomás; equipo de Esmeralda Martínez Vázquez, Angélica Jazmín Bocanegra Ortiz, Joshua Jael Rivera Pineda y Melissa Denisse García Álvarez.Durante el desarrollo del maratón, los asistentes también participaron en una conferencia impartida por socios de EY, quienes compartieron parte de su experiencia profesional en un foro de discusión centrado en los atributos que definen a un buen líder.Entre los temas abordados destacaron el desarrollo de habilidades blandas, la importancia del networking, el comportamiento ético y la adaptabilidad ante los retos de la profesión contable. Esta dinámica permitió a los jóvenes complementar el aprendizaje técnico con una visión más humana y estratégica del liderazgo profesional.Por último, Héctor Vázquez González, vicepresidente de Vinculación Universitaria, y Miguel Ángel Ávila Milpa, presidente del Comité de Integración de Contadores Universitarios (CICU), agradecieron la entusiasta participación de los estudiantes y los exhortaron a continuar involucrándose en las próximas actividades universitarias de la institución.
El Colegio y el Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (COMCE) se reunieron el 8 de octubre para dar firma a un convenio de colaboración con el fin de vincular ambas instituciones para encontrar oportunidades que permitan compartir sus recursos para fortalecer la competitividad empresarial en el comercio exterior, estimular la inversión innovación y promover desarrollo de tecnológico en México.Para este cometido, en nombre del Colegio, acudieron a la cita en las oficinas del COMCE el presidente Adolfo Ramírez Fernández del Castillo y María Luisa Ramírez Hernández, directora ejecutiva; acompañados de Jorge Alvarado Cordero y Luis Leonardo López Juárez, presidente y vicepresidente de la comisión técnica de Sector Empresarial. Por otro lado, Susana Duque Roquero, directora general del COMCE, acudió en representación de su institución en compañía de Yazmin Martínez Arévalo, directora de Administración y Finanzas, y Lourdes Arana Flores, directora de atención empresarial y relaciones institucionales.Las representantes de la COMCE señalaron que este acuerdo supone un puente provechoso para desarrollar iniciativas en favor del Colegio y el consejo, donde se puedan compartir conocimientos, buscar oportunidades y construir soluciones para el comercio internacional y la contaduría.El presidente Adolfo finalizó comentando que, en conjunto, ambas instituciones y sus comisiones especializadas pueden poner manos a la obra para proponer planes de acción a los cambios derivados de un mundo empresarial tan conectado internacionalmente, para generar impactos positivos.
El 7 de octubre, en las instalaciones del Colegio, se llevó a cabo el curso Inversión y negocios en Estados Unidos, actualización fiscal 2025, donde participaron especialistas de Deloitte, entre ellos: Eduardo Barrón Fernández, socio en Deloitte Impuestos y Servicios Legales e integrante de la comisión técnica Fiscal Internacional; Eduardo González, gerente director en Deloitte Tax LLP; Raúl Federico Aguilar Millán, socio en Deloitte Impuestos y Servicios Legales y también miembro de la comisión técnica Fiscal Internacional; y Diana Rodríguez Agiss, gerente del área Fiscal en Deloitte Tax LLP.El curso se enfocó en la tributación internacional en Estados Unidos y las implicaciones fiscales de las inversiones y negocios transfronterizos. Los expositores explicaron las principales diferencias en el régimen fiscal: distinción entre personas estadounidenses y extranjeras, sobre este tema, Diana Rodríguez Agiss comentó que las personas físicas y morales estadounidenses (ciudadanos, residentes fiscales o entidades constituidas en Estados Unidos) deben pagar impuestos sobre todos sus ingresos a nivel mundial, sin importar de dónde provengan. En tanto, las personas extranjeras (no ciudadanas, no residentes fiscales ni entidades estadounidenses) sólo son gravadas por Estados Unidos sobre ingresos que provengan de fuentes estadounidenses. Estos pueden incluir: a) o ingresos efectivamente conectados con un comercio o negocio (ECI) en aquellos que provienen de una actividad comercial o empresarial realizada en territorio estadounidense, y están sujetos a impuestos federales y estatales; o b) Ingresos no comerciales de fuente estadounidense (FDAP).Si no hay un comercio o negocio, Estados Unidos revisa si se aplican retenciones sobre estos tipos de ingresos. Referente al tema de ingresos acumulables y mecanismos antielusión, los ponentes discutieron las complejas regulaciones internacionales que se han implementado para luchar contra la elusión fiscal, entre los que destacaron : Ingresos acumulables, en el que Eduardo González explicó las normas sobre la inclusión de ingresos para los accionistas estadounidenses de corporaciones extranjeras controladas (CFC), en el que tocó temas como los ingresos de la Subparte F y el impuesto sobre los ingresos intangibles globales de baja tributación (GILTI). En tanto Eduardo Barrón abordó el impuesto contra la erosión de la base imponible y el abuso (Base Erosion and Anti-Abuse Tax - BEAT), que es un cálculo fiscal alternativo enfocado en grandes corporaciones. Otros temas tratados a lo largo del curso fue el crédito fiscal extranjero, en el que se destacó este mecanismo fundamental para evitar la doble tributación, permitiendo que se acrediten los impuestos pagados en el extranjero. Por último, se incluyeron conceptos sobre los ingresos intangibles generados en el extranjero (FDII) y la legislación sobre informes internacionales, mencionando formularios clave como el 571 y el 8992, por mencionar algunos. Asimismo, se dedicó un apartado especial a las disposiciones del Tratado Fiscal entre Estados Unidos y México.