El 14 de febrero, el Colegio presentó un foro llamado Reformas fiscales de la CDMX 2025, donde distintos expertos compartieron las actualizaciones fiscales que impactan en la Ciudad de México. Con apoyo de la coordinación de Virginia Ríos Hernández, vocera de la comisión T. de Investigación Fiscal, el panel brindó información relevante para presentar un ejercicio fiscal apropiado este año.
José Gerardo Alfaro Osorio fue el primero en participar, y señaló el contexto económico y aspectos importantes de la Ley de Ingresos de la Federación (LIF) que pueden influir en los ejercicios fiscales. El contador comentó que hay factores políticos y sociales que impactan en el desarrollo económico; puntualizó que las tensiones geopolíticas, la preocupación por la sostenibilidad y las tendencias al proteccionismo, impactan de forma directa a la economía y, en consecuencia, puede promover reformas fiscales.
De forma específica, según comenta el expositor, la LIF 2025 busca generar estabilidad en las finanzas públicas con la búsqueda de sostenibilidad de deuda y estimular una recaudación eficiente. En términos generales, sus ajustes no buscan la creación de nuevos impuestos, sino un control fiscal que permita una mejor recaudación.
En esa línea, Alejandro Guízar Acosta, durante su análisis sobre el Código Fiscal de la Federación (CFF), comentó que existe una tendencia por la búsqueda de digitalización para los procesos de fiscalización, como parte de la búsqueda de eficiencia en la recaudación. Este enfoque tiene implicaciones problemáticas ya que, según el comenta el presentador, “no podemos acostumbrarnos a hacer lo que diga la computadora, hay que aplicar la ley”.
Un ejemplo de los problemas derivados de la digitalización está en la restricción para cancelar Comprobante Fiscal Digital por Internet (CFDI), estipulada en el artículo 29-A del CFF. Esta restricción supone una multa ante la cancelación de CFDI, pero el monto de esta varía en función del monto del certificado; esto hace que la multa no esté condicionada por la acción cometida, siendo un acto anticonstitucional.
Para el caso de la Ley de Impuesto Sobre la Renta (LISR), la contadora Guadalupe Santos Moreno comentó que, a pesar de no haber sufrido una reforma integral, hay precisiones que hace, sobre todo modificaciones en torno a la contribución.
Una de ellas es la facilidad que brinda el Servicio de Atención Tributario (SAT) para que personas físicas cuyas obligaciones fiscales fueron actualizadas por la autoridad a un régimen distinto al Resico, puedan volver a él. La condición para ello es que los ingresos del año inmediato anterior no hayan superado los 2.5 millones de pesos y presentar un Aviso de actualización de actividades económicas.
Además, con el fin de mejorar los beneficios del régimen, se ha diferido la obligación de contar con buzón tributario y e.firma; estas acciones suponen un ejercicio de accesibilidad que permita a más personas ejercer su contribución tributaria en forma.
Para continuar, Adrián Urbina Galicia abonó sobre los impuestos indirectos. Para el caso del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), comentó que se incrementó en un 4,5% en algunos productos como los refrescos, bebidas saborizadas y cigarros; lo que busca reducir su consumo ya que, al gravar el consumo, su pago recae en quienes adquieren dichos productos.
En ese sentido, la contadora Laila Yarina Moreno Sotelo resaltó la inclusión de un nuevo impuesto ecológico, vinculado a la emisión de gases contaminantes a la atmósfera. Este impuesto, contenido en el Capítulo VII ter, tiene por objeto las emisiones de gases contaminantes directas a la atmósfera derivadas de procesos productivos; estarán sujetas a este impuesto personas físicas o morales en posesión de instalaciones cuya actividad genere estas emisiones.
Este nuevo Impuesto a la Emisión de Gases Contaminantes a la Atmósfera se determinará mediante una suma de emisiones contaminantes de dióxido de carbono, metano y óxido nitroso expresada en toneladas por mes; su pago corresponderá a 58 pesos por tonelada emitida de equivalente a dióxido de carbono.
Finalmente, Virginia Ríos comentó las reformas en materia laboral y de seguridad social y señaló algunos cambios relevantes para la presentación del ejercicio fiscal 2025. Entre esos cambios, destacó los nuevos salarios mínimos a considerar durante este año, sobre todo con relación al pago exento de retenciones de Impuesto Sobre la Renta a personas que perciban un único salario mínimo general.
La contadora puntualizó que se debe considerar el área geográfica para este propósito, ya que existe una distinción entre el salario mínimo general y el de la frontera norte.
Eventos recientes
El 28 de abril se presentó en el colegio el curso Criterios no vinculativos para efectos del informe fiscal, SIPRED. En el evento, bajo la coordinación de Teresa Cruz Rodríguez, representante de la comisión técnica de Auditoría Fiscal, se presentaron las consideraciones para tener en cuenta sobre los criterios no vinculativos contenidos en distintos cuerpos normativos.Para cubrir el tema, se contó con la valiosa participación de Manuel Corral Moreno y Álvaro Enrique Cordón Álvarez, integrantes de comisión mencionada previamente.Antes de comenzar, los contadores señalaron la importancia de los criterios no vinculativos ya que, aunque no tienen fuerza legal obligatoria, su relevancia permite alinear los tres elementos o perspectivas que convergen durante el informe fiscal: la autoridad fiscal, el contribuyente y el auditor; de esta forma, estos criterios permiten dar cuenta de la forma en que el sujeto pasivo (la autoridad) interpreta una normativa para orientar al sujeto activo (el contribuyente).Además, se comentó que, pese a que el contribuyente no tiene la obligación de considerar estos criterios vinculantes, “el auditor tiene la obligación de revelar las discrepancias entre los criterios de la autoridad fiscal y el contribuyente”, ya que en caso de no hacerlo puede ser copartícipe de un encubrimiento de discrepancias fiscales.Una vez establecido ese precedente, los ponentes detallaron los criterios no vinculativos relacionados con distintos cuerpos normativos, comenzando con el Código Fiscal de la Federación (CFF), la Ley de Impuesto Sobre la Renta (LISR), la Ley de Impuesto al Valor Agregado (LIVA), la LIEPS (Ley de Impuesto Especial sobre Producción y Servicios) y la Ley de Ingresos sobre Hidrocarburos (LISH). Para cada apartado, los expositores comentaron los criterios no vinculativos aplicables a cada conjunto de leyes y ejemplos prácticos que permitieron profundizar en ellos, desde aquellos relacionados con la expedición, timbrado y entrega de CFDI; la base gravable del IEPS en la prestación de servicios de juegos con apuestas y sorteos; la deducción de pagos a sindicatos; los gastos a favor de terceros; entre otros.
En la conferencia universitaria de abril, el tema principal fue los Instrumentos auxiliares de fiscalización del SAT, un evento que contó con la destacada participación de la Escuela Superior de Comercio y Administración (ESCA) Tepepan. David Osorio Cetina, docente de referida institución educativa, tuvo la responsabilidad de explicar en detalle los mecanismos y herramientas que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) emplea para respaldar y complementar sus facultades de comprobación. Su ponencia se centró en cómo estos instrumentos ayudan a identificar posibles incumplimientos fiscales por parte de los contribuyentes. El curso, que se ofreció de manera gratuita en un formato híbrido el 24 de abril, fue inaugurado por el vicepresidente de Vinculación Universitaria, Héctor Vázquez González, junto con el profesor de la ESCA Tepepan, Hugo Rodríguez Barbosa. Durante su presentación, Osorio Cetina hizo hincapié en la importante diferencia entre estos instrumentos auxiliares y las facultades de comprobación directas del SAT, como las visitas domiciliarias, revisiones de gabinete y revisiones electrónicas. Subrayó que los instrumentos auxiliares no son actos de fiscalización en sí, sino que ofrecen información y elementos valiosos para que el SAT pueda ejercer sus facultades de manera más eficiente y selectiva. En este contexto, la recomendación más importante es prestar atención a los comunicados emitidos por la autoridad fiscal. Este tema está estrechamente relacionado con el control interno de las empresas, por lo que es esencial mantener un diálogo con las áreas de contabilidad y, si es necesario, con asesores fiscales. Al recibir un comunicado del SAT, es crucial verificar la información que la autoridad presenta. Por ejemplo, si el SAT notifica la omisión de la declaración anual, se debe corroborar de manera interna el estado de dicha obligación. Una de las grandes ventajas en el ámbito de las vigilancias profundas es que el cumplimiento que se realiza después de recibir un comunicado se considera aún como algo espontáneo. Según el artículo 72.° del Código Fiscal de la Federación (CFF), “si se presentan las declaraciones de manera espontánea, se está exento de sanciones por parte de la autoridad”, destacó el también abogado en Derecho. “Así que, aunque llegue una notificación, si se presenta la declaración después, sigue siendo considerada espontánea. Esto es muy diferente a un requerimiento formal por no cumplir con las obligaciones, donde la espontaneidad ya no cuenta”. La oportunidad de corregir la situación fiscal sin tener que enfrentar multas u otras sanciones es un gran beneficio para el contribuyente. Por último, David Osorio destacó la importancia de visitar la página oficial del SAT y la plataforma de gobierno abierto, donde se publican cifras de recaudación que muestran lo valiosos que son estos instrumentos auxiliares y la vigilancia constante en la labor recaudatoria del SAT. "La eficiencia que han demostrado estas herramientas ha asegurado su uso continuo, marcando un avance firme en la estrategia de fiscalización, ya que permiten una recaudación significativa sin necesidad de ejercer facultades de comprobación directas", concluyó.
En el entorno empresarial que al pasar de los años se ha vuelto más dinámico, complejo y digitalizado, la función de auditoría interna está llamada a evolucionar. Así lo expuso Edgar Cruz Cruz, miembro de la comisión SE Auditoría Interna, el pasado 11 de abril durante su presentación en el curso Auditoría Interna Ágil, en la cual compartió un enfoque innovador basado en metodologías ágiles como scrum, lean y kanban, aplicadas con éxito en diversos sectores más allá del desarrollo de software.En el evento, coordinado por Armando Patiño Torres, de comisión mencionada, Cruz Cruz destacó que estas metodologías, lejos de sustituir los métodos tradicionales, los complementan y potencian, permitiendo dividir auditorías extensas en entregables más pequeños y manejables, optimizando tiempos y enfocándose en lo verdaderamente crítico. “Se trata de entregar valor desde etapas tempranas, mantener ciclos de mejora continua y alinear la auditoría con los objetivos estratégicos del negocio”, puntualizó.En su presentación profundizó en la aplicación de scrum dentro de la auditoría interna. Cruz explicó cómo estructurar el trabajo en sprints (ciclos de máximo cuatro semanas), donde se planifican tareas específicas, se realizan reuniones diarias de seguimiento y se entrega un producto final por cada ciclo: desde hallazgos hasta informes completos. En ese sentido, definió los roles del proceso: el product owner, el scrum master y el equipo de auditores, quienes trabajan de manera colaborativa, autónoma y adaptativa.Uno de los ejemplos más ilustrativos fue el caso ficticio de la empresa “El Conejo Feliz”, donde la auditoría al proceso “orden al pago” fue segmentada en sprints semanales, lo que permitió realizar entregas constantes y mantener una alta alineación con las áreas auditadas. Con ello, se demostró que incluso en equipos pequeños, estas metodologías pueden mejorar la trazabilidad, la velocidad de respuesta y la capacidad de adaptación ante cambios o nuevos hallazgos.Durante su intervención, Cruz hizo hincapié en que la adopción de metodologías ágiles requiere una cultura organizacional madura, liderazgo comprometido y equipos capacitados. Identificó como principal obstáculo la resistencia al cambio, y resaltó la importancia de comunicar claramente los beneficios de este enfoque dentro de la organización.También abordó la relevancia de contar con manuales de auditoría actualizados y vivos, ajustados a normas internacionales, pero con flexibilidad para incorporar enfoques ágiles. En ese sentido, se invitó a los asistentes a reflexionar sobre la pertinencia de sus propios marcos de trabajo y la necesidad de incorporar valores y principios ágiles como la colaboración, la adaptación al cambio y la entrega continua de valor.Además de los aspectos técnicos, la charla abordó temas estratégicos. Edgar Cruz subrayó la necesidad de que la auditoría interna esté alineada con la gestión de riesgos empresariales (ERM) y participe activamente en el cumplimiento y desarrollo del negocio. Enfatizó que la oportunidad en la entrega de informes es esencial, pues auditorías que se entregan meses después pueden perder relevancia. “La auditoría debe prevenir, no solo registrar errores del pasado”, afirmó.Finalmente, se compartieron ejemplos de organizaciones que ya están aplicando con éxito estas metodologías en sectores como salud, finanzas, manufactura y tecnología, demostrando que el enfoque ágil es viable en organizaciones de cualquier tamaño, siempre que se adapte a sus necesidades específicas.